Viaje hacia Escocia…

Hola chicasss!! Cómo lleváis la semana?? Ayer me invitaron a una cena maridaje con cócteles Peated Malts en el Restaurante Murri. Antes de nada comentaros que no había ido nunca a este restaurante y es una pasada, muy recomendable.

Murri, pertenece a un grupo de restaurantes fundados en 2015. Una aventura que comenzó hace doce años como un restaurante de amigos y que hoy en día se ha convertido en un proyecto consolidado gestionado por un gran equipo de profesionales. En 2015 lanzaron el Restaurante Terre, un espacio abierto para todo tipo de planes alrededor de la comida, y en 2016 reabrierón Murri, un restaurante íntimo para disfrutar de la cocina.

Primero nos pusieron un cocktail de bienvenida con The Ardmore en el restaurante Terre. No os lo he comentado antes, pertenecen al mismo grupo y además se comunican, una pasada. Así el primer contacto lo tuvimos en la barra de Terre, la atención exquisita y lo que más me gustó, me dieron una tarjeta con la contraseña del wifi jajaja!!

Parece una tontería y muchas os reiréis pero para mi es muy importante todos los detalles, desde el minuto uno. En muchos países de la UE te lo ponen junto a la carta y aquí tienes que ir detrás del camarero preguntando, cuando creo que es un servicio más, no?

Acto seguido nos llevaron al Murri y nos sentaron alrededor de una mesa donde no faltaba detalle. Y ahí estaban… los cuatro whiskies que íbamos a probar: Bowmore 12, Laphroaig 10, Laphroaig Quarter cask y Bowmore 15 darkest.

El primer y único entrante me llevó a la misma playa de San Juan,… Empezamos fuerte!! Nos pusieron dos ostras, una de ellas al natural y la otra con ceviche carbonizado, todo un bocado de mar. A la ostra al natural algunos nos atrevimos a echarle unas gotas de Bowmore 12, qué para mi gusto fue el whisky que más me gusto.

El primer plato fue zanahoria con cigala y en esta ocasión maridado con el whisky Laphroaig 10. Y cuando nos comentaron que nos «llevarían» a la misma Escocia, que iba a ser todo un viaje lleno de nuevas sensaciones, no me lo creía y… ver para creer.

El segundo plato era anguila ahumada con coliflor tostada y tuétano, marinado en este caso con el tercer whisky, un laphroaig Quarter cask.

Y el tercer plato, una pechuga de pato azulón con pera escalivada, estaba riquísimo! Todo ello maridado con el Bowmore 15 darkest.

Y como podéis ver, en todo momento teníamos nuestras copas con los 4 whiskies escoceses que como os he comentado nos llevarían a la misma Escocia. El segundo, Laphroiaig 10, tenía un olor ahumado y lo mezcle con agua, enseguida perdió ese olor pero el sabor era aun más intenso. Es un gran mito eso que dicen que no puedes ponerle hielo o agua al whisky.

Una cena maridaje de 10!

Pero aquí no queda la cosa, faltaba por llegar el postre, babá al Bowmore 15 Darkest con helado de vainilla. De normal el babá se toma con ron pero lo cambiaron por el whisky y muy rico.

No puedo decir nada negativo, entraba pensando «que hago aquí si no me gusta el whisky» y salía comentando… «de todos me ha gustado el primero y el último pero en el postre». Una gran experiencia que volvería a repetir una y otra vez, he aprendido bastante de whiskies, cosas que no sabía. He tirado por tierra varios mitos y estoy encantada!

¿Qué os parece la experiencia? ¿Os apuntariais a una? ¿Sois de Whisky? 

Espero vuestros comentarios y si os ha gustado os animo a compartirlo 😉

Nos vemos por las redes sociales (Twitter, Instagram, Facebook)

¡¡¡MUCHOS BESOS BLOGGERILES!!!